
Poco a poco las sensaciones que
sentías cuando eras un niño van desapareciendo, la inquietud que tenias por descubrir nuevas cosas quedó atrás, ahora todas las sendas
están marcadas, nada tiene perdida, el camino desde el parque hasta casa está marcado por señales que no son más que el propio reloj marcando el tiempo insufrible que nos
empuja a un bote de
Prozac.
Prozac... que paradoja, antes las
únicas pastillas que
conocíamos eran las de los caramelos Pez, y a decir verdad no nos aliviaban la depresión porque esa palabra no
existía en nuestro vocabulario, Don
Pimpón no nos la enseñó.
De esas, de esas drogas quiero yo...
ResponderEliminarAl ver estas fotos me he acordado de que parece que haga toda una vida de cuando el mejor momento del día era cuando salíamos del colegio y nos íbamos corriendo a comprar las chuches en el quisco de enfrente...Era todo el "chute"que necesitábamos...
ResponderEliminarY me he puesto nostálgica....
Sigue con el blog.Me encantan tus fotos y lo que comentas de ellas, se nota que es como ves el mundo...
ResponderEliminarmmm... que buenas!!! ^^
ResponderEliminarrecuerdo bien el dia que hicistes estas fotos, tienes su historia, y el dolor de barriga del atracon que nos metimos, jeje, petons
ResponderEliminarMe gustan mucho las fotos y el tema que has tatado es nuevo y original..y las fotos muy chulas,perfectas...
ResponderEliminar